Mudanza (II acto)
Instalación
(dimensiones variables)
2018
Proyecto llevado a cabo en varios actos.
El primer acto se desarrolló en 2016 en el programa Residentes de Sala Guirigai, entre Los Santos de Maimona (Badajoz) y Barcelona. El segundo acto comienza en Bilbao y pasa por el Centro de Arte
Complutense de Madrid para acabar
en Sevilla.
Mudanza (I acto)
Publicación
2016
En el primer acto se aborda la mudanza desde el gesto teatral. Un traslado supone siempre una alteración (espacio, tiempo, estado...) que lleva implícito el hecho de performatividad por su carácter continuo y procesual. Una mudanza trae consigo una serie de particularidades que hacen de la acción un fenómeno ciertamente teatralizado, que incluso podría tener una relación directa con el sistema del arte. El ritual de embalaje y desembalaje, el transporte, o la selección y categorización de obra en base a su valor nos llevan a pensar en colecciones personales de objetos que arrastramos de un lugar a otro, como si atesorarlos fuera nuestra única respuesta a la falta de estabilidad del presente.
¿No es mudar-se también una forma de cambiar? ¿perder objetos para ganar otros?... En esa línea, este proyecto nos hace preguntarnos si la mudanza es el símbolo por excelencia de precariedad hoy.
En el segundo acto (2018), la obra fue parte de la exposición "Narrativas de andar por casa" en el Centro de Arte Complutense de Madrid. Esta pieza fue expuesta tres años después de que tuviese lugar el proceso de investigación inicial que dio lugar al primer acto, por lo que la mayoría de los objetos que se utilizaron en el proyecto ya no existían: algunos objetos eran préstamos de los agentes que participaron en el proyecto, otros, simplemente, no pudieron ser almacenados debido a continuos cambios de residencia. Esa necesidad de movimiento incesante, causada en parte por la obligación de ser visible, se traduce en constricciones a la hora de repensar las piezas cada vez que van a ser expuestas. En este caso, se parte de lo único que se conservó de aquella primera experiencia: una pequeña publicación donde la realidad y la ficción se mezclan, los tiempos y las distancias se convierten en masa.
En este caso, la nueva instalación (II acto) funciona como un almacén para los objetos personales de la artista, pues justo en ese momento estaba cambiando de residencia por tercera vez ese año. En el tiempo-espacio-masa que sucede-está-pesa entre Bilbao y Barcelona las cajas reposan en Madrid. Un punto medio lejano, fuera de ruta, que transita entre lo confortable y lo pasajero. Un almacén en el que únicamente se tiene acceso al libro a través de una proyección. Grandes cojines invitan al espectador a sentarse en un lugar aparentemente cómodo, mientras las cajas están llenas de objetos personales, esperando volver a ser trasladados al próximo lugar de trabajo de la artista.
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